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Medio Ambiente

La minera Twin Metals demanda a EEUU por cancelar proyecto de cobre y níquel en Minnesota

En enero, el gobierno de EEUU bloqueó el desarrollo del proyecto.

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Twin Metals, subsidiaria de la minera Antofagasta PLC, perteneciente al grupo Luksic, emitió una demanda al Gobierno de Estados Unidos como parte de sus intentos por revivir un yacimiento de cobre y níquel en Minnesota.

Recordemos que, en enero de este año, la administración del presidente Joe Biden, bloqueó el desarrollo del proyecto. La razón, según expusieron, radica en la posible contaminación de una importante vía fluvial recreativa.

Estas medidas, según señala un informe de Reuters, resultan “arbitrarias y caprichosas”. Por ello, la compañía reclama su derecho a demostrar que el desarrollo del proyecto no compromete la estabilidad ambiental.

Por otro lado, la minera Twin Metals también argumenta que la construcción de la mina generaría un gran beneficio para el país; ya que, la mina subterránea se convertiría en una fuente importante de cobre níquel, dos elementos de gran importancia en el proceso de transición energética.

Ahora, el Tribunal Distrital de Washington tiene la demanda con la que la minera busca restablecer los contratos de arrendamiento.

Dean DeBeltz, director de operaciones y seguridad de la compañía, califica de “ilegal” la cancelación de los contratos que hizo el gobierno. Por ello, señala que, con esta demanda “queremos defender lo que es correcto y lo que prescribe la ley”.

Oposición al proyecto de la minera Twin Metals

El proyecto de la minera Twin Metals enfrenta una fuerte postura que señala que la mina pondría en peligro la reserva Boundary Waters Canoe Area Wilderness. Según señalan, el desarrollo de la minería contaminaría la reserva, que consta de 405 000 hectáreas en la frontera con Canadá.

Becky Rom, de Campaign to Save the Boundary Waters, un grupo de conservación de Minnesota, deja clara su postura al señalar que “un ambiente rico en agua es el lugar equivocado para la minería”.

Actualmente, existe una propuesta para prohibir la minería en las aguas fronterizas durante 20 años. Mientras que, en el Congreso, se cocina una legislación que busca prohibir, de forma permanente, la actividad minera en la región.