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Razones para que Tía María no se paralice

Se busca evitar lo sucedido en 2011, con Conga en Cajamarca.

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Existen muchas razones para preocuparse respecto a lo que pueda suceder con el proyecto minero Tía María. Sobre todo, luego que el congresista oficialista Jaime Quito indicara la semana pasada que una comitiva del Gobierno, liderada por el presidente del Consejo de Ministros, Guido Bellido y el titular del Minem, Iván Merino, viajarían a Arequipa para impedir su desarrollo.

Y, a pesar que más tarde el propio premier negara dicho viaje, la preocupación ya se había instalado en quienes apoyan el proyecto.

De hecho, muchos comenzaron a recordar lo sucedido en el año 2011, cuando, durante el gobierno de Ollanta Humala, se canceló Conga.

En efecto, existe mucha similitud en ambos escenarios; por lo que ahora es preciso traer de vuelta lo sucedido en Cajamarca, a fin de argumentar las razones para no cometer lo mismo con Tía María.

Según recuerda el diario Perú21, la inversión en Conga, a cargo de Yanacocha, significaba un desembolso aproximado de US$ 5000 millones.

Razones económicas para desarrollar Tía María

Diego Macera, gerente del IPE, en entrevista con la fuente, sostuvo que, entonces, la región crecía a buenas tasas, y había auge en los negocios. Sin embargo, “de 2012 en adelante registra un periodo profundo de recesión. Puso en duda, además, una serie de proyectos muy importantes en Cajamarca”.

De esa forma, se desprende que una de las razones para no ir contra el proyecto minero Tía María tiene que ver con el desarrollo económico.

En efecto, según cifras del INEI, desde 2011, Cajamarca figura como la primera entre las jurisdicciones más pobres del país. Y en el año 2019, el indicador de pobreza oscilaba entre 34.4% y 39.4%.

Por su parte, Anthony Laub, de LQG Energy & Mining Consulting, recordó que antes de la suspensión, se estimaba que Conga tributaría US$3,000 millones. Ello, al cambio y precios internacionales actuales, podrían haber llegado a los US$8000 millones, según el especialista.

De esa forma, las razones para promover la viabilidad de Tía María, aumentan.

“Hay que tener en cuenta la situación de Cajamarca ahora para que no se repita en Arequipa. Tía María impacta en otros proyectos; es decir, si no se ejecuta este proyecto que tiene todos los permisos, la señal que envías es que no te importa que se cumpla con la ley”, aclara.

Trabajo y generación de empleo

Otro de los argumentos a favor del desarrollo de grandes proyectos mineros en el país está en la generación de empleo.

De hecho, las razones que se desprenden de lo que menciona Macera a favor de proyectos como Tía María van en esa línea.

Por ejemplo, recordó que para Conga se estimaba la creación de 1000 a 1500 empleos durante la construcción de la estructura de embalse y sedimento de la mina; mientras que, en el periodo pico de la construcción, esa cifra aumentaría a 5000-7000 puestos de trabajo.

“Aproximadamente 1600 puestos de trabajo una vez que se inicien las operaciones. Y recordemos que cada empleo en minería genera ocho en actividades relacionadas”, puntualizó.

Entonces, vemos cómo el empleo resulta otra de las razones clave para que se impulse el desarrollo de proyectos como Tía María.

De hecho, Macera estima que este proyecto arequipeño podría generar 9000 puestos de trabajo entre directos e indirectos. Solo para la operación, calculó entre 600 empleos directos y otros 4200 indirectos.

Finalmente, el exviceministro de Minas, Rómulo Mucho, señaló que la situación actual del Perú exige dar importancia a la inversión minera.

“No hay ningún proyecto que esté de más, principalmente los paralizados”, explicó Mucho, apoyando las razones para no detener Tía María. “Necesitamos recursos y la minería genera esos recursos”, indicó.

Asimismo, reiteró que “una inversión bien llevada es rentable y socialmente responsable, así que no tengamos miedo al desarrollo”.